Escuela de Tiro y Caza Gonzalo Gómez

Legado de Precisión: La Historia de Nuestra Escuela de Tiro

Desde su fundación en 1986, nuestra escuela de tiro ha sido un referente en la formación de tiradores apasionados y dedicados. Este ilustre proyecto nació de la visión y el esfuerzo de Gonzalo G. Escudero, un hombre cuyo amor por el tiro con escopeta floreció desde una temprana edad. Con el paso de los años, y gracias a su incansable dedicación, Gonzalo alcanzó numerosos éxitos tanto en el ámbito nacional como internacional, formando parte del equipo nacional de Skeet durante 25 años. Estos logros no fueron fruto del azar, sino de una profunda dedicación al estudio y análisis de la técnica del tiro con escopeta, perfeccionada a lo largo de incontables horas de entrenamiento y reflexión.

La escuela comenzó su andadura en el legendario club Valti de Paracuellos, para luego trasladarse por distintos campos de tiro, dejando su huella en Canto Blanco, Diana Campo, Méntrida, La Bastida (Toledo) y el campo de Cabanillas. Además, el espíritu de enseñanza y superación que siempre ha caracterizado a nuestra escuela nos ha llevado a impartir cursos en casi toda la geografía española y en escenarios internacionales tan diversos como Chile, EE. UU., Argentina, Italia y otros países.

Consciente de la importancia de compartir su vasta experiencia y conocimientos, Gonzalo G. Escudero tomó la decisión de transmitir su técnica a través de la escuela, con el noble propósito de ayudar a miles de aficionados a perfeccionar su precisión y mejorar notablemente sus resultados, tanto en el tiro deportivo como en el ámbito cinegético.

Hoy en día, el legado de excelencia continúa bajo la dirección de Gonzalo Gomez Arrimadas, elegido personalmente por su padre para tomar las riendas de la escuela. Gonzalo ha demostrado no solo igualar los éxitos deportivos de su progenitor, sino superarlos, consolidándose como uno de los mejores tiradores con escopeta a nivel mundial. Esta combinación de talento innato y dedicación incansable ha convertido a Gonzalo en un referente tanto en la alta competición como en el tiro de caza.

Siguiendo el ejemplo de su padre, Gonzalo no solo destaca por su maestría en el tiro, sino también por su capacidad para formar grandes tiradores, inspirando a sus alumnos a alcanzar la perfección y superarse día tras día. Nuestra escuela sigue siendo un lugar donde la tradición se une con la innovación, forjando campeones y amantes del tiro que llevan en su interior la pasión por este noble deporte.